¿Película de ficción o Inseguridad?

Detenidos en Madrid a los componentes de un grupo de narcotraficantes, que introducían cocaína en nuestro país, desde Ecuador y la distribuían desde Paracuellos.
El líder del grupo aprovechaba su condición de tripulante de cabina para facilitar la entrada de la sustancia. La droga venía camuflada en bolsas de solución salina fisiológica.

 Se han incautado 17 bolsas con un peso de un kilogramo y cinco kilogramos más convertidos en polvo. La forma de transformarla resultaba muy fácil, bastaba con extender la sustancia viscosa y dejarla secar.
Se inició una investigación dirigida sobre un ciudadano ecuatoriano, David F.B.V., alias “el gordo”. Se sospechaba que desde varios apartamentos sitos en Paracuellos del Jarama, importaba y distribuía cocaína a distintos puntos del territorio español e incluso de localidades francesas.
Investigaciones posteriores permitieron conocer que para introducir la droga utilizaba a compatriotas, vía aérea, que trasladaban en cada viaje 10 bolsas con cocaína diluida en líquido. Se supo que el pasado martes esperaban una nueva partida y se les siguió hasta un hotel en las proximidades de avenida de América. Hasta allí llegaron también los tripulantes de una compañía aérea para pernoctar. Los agentes interceptaron un “pase” de un miembro de la tripulación, Alberto M.A., a un ciudadano rumano, Adrian Marius S., quien a la postre resultó ser el encargado de la recepción de la droga del grupo. Se trataba de 10 bolsas idénticas, negras con la marca “B-Dex”, y la inscripción “dextrosa al 5% en solución salina fisiológica con complejo B, 1.000 ml.” Al realizar la prueba del narco-text con una muestra del líquido, dio positivo a la cocaína. Tripulante y receptor de la droga fueron inmediatamente detenidos.
El tercer arrestado fue el lugarteniente de “el gordo”, encargado de vigilar la zona para que todo discurriese sin incidentes y por supuesto para detectar, en su caso, una posible presencia policial.
Poco después, en el polígono de las Mercedes, se detuvo a Jairo Enrique E.Y., ciudadano colombiano encargado de supervisar la droga y del lugar de custodia, y a Jaime M.M., ecuatoriano, encargado de “encaletarla”.
El sexto y último arrestado fue David F.B.V, alias “gordo”, principal responsable del grupo. Posteriormente se localizó un piso de seguridad empleado por los arrestados en un apartamento de una urbanización próxima, donde se encontraron siete bolsas con cocaína idénticas a las intervenidas y cinco kilos de coca en polvo. La droga se encontraba en un falso techo del cuarto de baño y en el interior del zócalo de la cocina, respectivamente. También se encontró una báscula de precisión y numerosa documentación pendiente de estudio.
El líquido contenido en las bolsas, al parecer, se transformaba en cocaína simplemente dejándolo secar. Los seis detenidos pasaron este fin de semana a disposición judicial.