Juicio contra Panrico

Hoy día 6 de Febrero se celebra el juicio en los juzgados de lo social sito en la calle de la Princesa en Madrid, que enfrenta a las partes de trabajadores contra la dirección de Panrico.
En este caso se acusa mediante denuncia colectiva a la dirección de la empresa por cambiar de turno a 18 trabajadoras de manera injustificada.

Aunque Panrico alega en su defensa que se debe a motivos de organización, las trabajadoras tienen claro que se trata de un modo de presión para negociar la salida de una línea de producción de las más antiguas en la empresa.

Desde que la firma británica de capital riesgo Apax Partners comprará el 100% de Panrico, han existido innumerables problemas de similares características a las que sufren estas trabajadoras. Paso también con el sector de los distribuidores lo mismo que sucede con las distintas líneas de producción: presionar por secciones para no provocar una protesta masiva, pero poco a poco quitarse de encima a personal con antigüedad para reemplazar con mano de obra “barata”; o lo que es peor a aun, cerrar las infraestructuras de Panrico en Paracuellos por motivos económicos.

Y es que Panrico incrementa día a día su beneficio neto (60% en 2004), pero no por sus ventas brutas (7% de media en los últimos años), sino en detrimento de sus empleados/as. Desde la compra de Panrico por parte del grupo de capital riesgo Apax, mientras no existe un claro incremento de la facturación, si existe paradójicamente una voluntad y esfuerzo en la reducción de los costes, como despidos de trabajadores y cierre de plantas (Barcelona), la automatización de las líneas de producción y la reestructuración de varias fábricas, además de la venta de varios edificios en Madrid y Zaragoza que no estaban afectos a la explotación del negocio.

Desde Paracuellos Joven nos solidarizamos con las trabajadoras de Panrico afectadas y con sus familias, así como invitamos a las fuerzas políticas, sea cual sea su ámbito, intercedan de una vez en casos de abuso de poder como en este. Basta ya de consentir actuaciones injustas al que más tiene en perjuicio de los de siempre.